Enclavada en un verdadero paraíso de montaña, la estación de esquí Aramón Cerler no sólo es la más alta de Aragón, sino que tiene además el mayor desnivel esquiable del Pirineo. Custodiada por multitud de picos de más de 3.000 metros de altura, es una estación con verdadero espíritu alpino.
Esquiar en Cerler implica enamorarse de las montañas. Es una localización idónea para quienes se inician en el esquí. Cuenta con dos amplias zonas de debutantes, que situadas a más de 1.800 metros, garantizan una nieve estupenda y una gran escuela.
Los amantes del freeride y las emociones fuertes deberán dejar atrás las laderas de pino negro, llegar hasta las cimas de los picos Gallinero, Cogulla, el collado de Sarrau o Basibé para, desde allí, lanzarse hacia emblemáticos descensos.
Algo que no pasa desapercibido a ningún esquiador son las vistas que rodean a la estación. Un entorno privilegiado del que es imposible no quedarse prendado, ya que las vistas son uno de son mayores encantos.
Cota máxima: 2.360m
Cota mínima: 1.500m
Desnivel: 1.130m
Domino esquiable: 80km
39 km de innivación artificial
Pistas: 72 (10 verdes, 19 azules, 27 rojas, 15 negras, 1 itinerario), Snowpark, Boardercross, Pista de trineos, 4 pistas esquí de travesía, Circuito de motos de nieve)
Remontes: 20 (3 telesillas sextiplaza, 5 telesillas cuatriplaza, 2 telesillas biplazas, 4 telesquís, 6 cintas transportadoras)