Destinos Descubre el valle Experiencias Planificación
{{rrss.icon}} ES EN FR
Inicio Naturaleza Lugares con encanto Espacios de nieve Invierno Verano y otoño Historia y cultura Gastronomía Otras maneras de conocer el Valle Conoce el valle jugando Experiencias Dónde dormir Dónde comer y beber Planifica tu actividad Comercio y servicios Agencias de viaje Cómo llegar Cómo moverse en el Parque natural Posets Maladeta Descargas


Español English Français

{{rrss.icon}}

Chía

Pequeño pueblo situado al pie de la sierra con su mismo nombre, del que se tiene constancia documental desde principios del siglo XI, con el nombre de Gía, aunque su origen debe ser mucho anterior al siglo X.

Pequeño pueblo situado al pie de la sierra con su mismo nombre, del que se tiene constancia documental desde principios del siglo XI, con el nombre de Gía, aunque su origen debe ser mucho anterior al siglo X. En 1.099 Pedro I de Aragón (1068-1104) donó a San Pedro de Taberna la villa de Chía. Alfonso I en 1126 confirma la donación a los monasterios de San Pedro y San Victorián: “(…) dono et concedo et afirmo domino Deo et Santo Petro de Taberna et Santo Victoriano una villa que dicitur Gia (…)”. 

En el casco urbano se descubren interesantes ejemplos de la arquitectura propia de las casas de la montaña pirenaica, con detalles y símbolos propios de la sociedad rural montañesa. Pueden admirarse también las dos iglesias románicas (y sus pequeños cementerios, hoy en desuso) resultado de las disputas y enfrentamientos que durante la época feudal hubo entre los señores de Chía y el monasterio de San Victorián, lo que llevó a construir dos parroquias: San Martín, que conserva su ábside original y una bonita espadaña y San Vicente, actual iglesia parroquial, románica en origen que ha sufrido muchas transformaciones y que tiene adosada una torre campanario.

También forma parte de su rico patrimonio la ermita de La Virgen de la Encontrada. Esta virgen, como indica su nombre, fue hallada en el Siglo X por un pastor, según cuenta la tradición. Antiguamente, todos los sábados del mes de mayo se realizaba una procesión en la que los vecinos subían hasta la ermita acompañados por los músicos y por los mayordomos, organizadores de las fiestas, que marcaban el ritmo con los pies y tañedo castañetas.

Es imprescindible ascender al Mirador de la Serreta, que permite disfrutar de unas impresionantes vistas panorámicas de todo el Valle de Benasque.

fas fa-times

{{ planning.translation.title }}

  • · {{ partners_tipology.translation.title }} ({{partners_tipology.contents.length}})

Formulario enviado con éxito

Hemos recibido su formulario correctamente y en breve nos pondremos en contacto con usted.
Las cookies son importantes para el correcto funcionamiento de las páginas web. Usamos cookies para recopilar estadísticas para optimizar la funcionalidad de nuestra página web. Haga clic en “Aceptar y proceder" para aceptar las cookies e ir directamente a nuestra página web o haga clic en “Más información” para ver la descripción detallada de los tipos de cookies que utilizamos y decidir si acepta o rechaza nuestra política de cookies.
ACEPTAR Y PROCEDER