Partiendo de la localidad de Benasque/Benàs, se toma el desvío que hay a la entrada del pueblo, delante de la vieja gasolinera, y que lleva por un amplio sendero que transcurre de forma paralela al río Ésera.

Al llegar al puente que cruza el río Ésera, un puente no útil para coches, se gira a la izquierda, cruzando el río, y tomando el sendero que nos llevará hasta la entrada del pueblo de Anciles/Ansils.

Ancils/Ansils, sorprenderá a aquellos que no lo conozcan, porque aunque su tamaño le aproxima más a una aldea que a un pueblo, el maravilloso conjunto de casas que reúne y su estado de conservación no deja a nadie indiferente. Muchos son sus atractivos, pero sin duda el más destacado es el de sus espléndidas casas solariegas que datan de los Siglos XVI y XVII. Casa Suprián, Casa Sebastián, Casa Sort, Casa Barrau, Casa Escuey..., el nombre de estas casas aún sirve para conocer a casa uno de los miembros de las familias que las habitan.

Cruzaremos el pueblo por la calle mayor, peatonal, teniendo mucho cuidado en no romper la tranquilidad de las personas que habitan y visitan este precioso lugar. Pero si tenemos tiempo, callejearemos por este pequeño núcleo, visitando sus casas y su iglesia de origen románico.

Al salir de Anciles por el sendero PR-HU 33 nos encontraremos con un precioso camino con muros de piedra seca, reminiscencias de tiempos pasados en las que los caminos eran utilizados por personas y ganado para moverse por el valle. Siguiendo el sendero pasaremos al lado del la urbanización de Linsoles y continuaremos hasta llegar al lago de Eriste, que tiene como origen la presa de Linsoles, construida en los años 60 y que supuso una transformación global del pueblo de Eriste, de sus usos y de su paisaje.

En este momento podemos elegir cruzar el puente y acceder a Eriste/Grist, que en tiempos fue Villa y que actualmente es un maravilloso pueblo pirenaico. Elegiremos dar la vuelta al lago por el paseo que lo rodea, un espacio que en verano se llena con la bulliciosa actividad acuatica del lago y que durante todo el año es un foco de atracción de paseantes. Al llegar al final, continuaremos el camino situándonos bajo la presa de Linsoles y cruzaremos el río Ésera para llegar a la carretera A-139, que vertebra el Valle de Benasque de Norte a Sur siguiendo el trazado del río Ésera y que deberemos cruzar con especial atención en el tráfico.

Cogeremos en este lugar el acceso al santuario de Guayente, uno de los templos más venerados en el Valle de Benasque que se alza sobre un escarpado. Merece la pena parar en este lugar para visitar el pequeño santuario y disfrutar de las hermosas vistas.

Continuaremos por la pequeña carretera que une el santuario con la cercana localidad de Sahún/Saúnc, que posee un conjunto urbano muy bien conservado, guardando sus casas y calles la belleza típica del Pirineo. No iremos más allá, callejearemos y disfrutaremos de este pequeño pueblo antes de tomar el camino de vuelta, que seguirá la misma ruta con la excepción del último tramo, el que transcurre entre Anciles/Ansils y Benasque/Benàs. En el pueblo de Anciles/Ansils seguiremos, en la plaza que sirve como parking para que los coches no entren al pueblo, la pequeña carretera que une esta localidad con el pueblo de Benasque/Benàs, accediendo al pueblo por el mismo lugar que lo habíamos dejado, el puente que cruza el río Ésera. 

Fotos ciclismo: Theblackmountain (Eduardo Moreno), información de la ruta y gpx: Centro BTT Puro Pirineo